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lunes, 2 de diciembre de 2019

Reseña: Tampoco pido tanto



¿Es cierto eso de que nuestro destino está escrito? De no ser así… ¿Cómo hay personas que son capaces de adivinar todo lo que está por llegar? ¿Cómo si no, una carta escogida al azar, unos posos pegados al fondo de una taza de café o unas líneas en la palma de la mano pueden acercarte a tu futuro y pueden predecir así, algo que todavía no ha ocurrido?

Daryl siempre ha creído que todo eso de la adivinación no eran más que cuentos chinos, por eso, cuando su abuela le pronosticó que un tsunami arrasaría su vida y su corazón, se lo tomó a risa, sobre todo, porque él, nunca se enamoraba… Pasarlo bien sin compromiso, era más su estilo. A Carol, por su parte, le ocurría algo parecido… Para ella, los hombres eran un juego y hacía tanto tiempo que había dejado de creer en cuentos de hadas para poder centrarse en su trabajo, en su carrera como bailarina y en cuidar a su familia… Que cuando Daryl apareció en su vida, no supo cómo actuar… Él, piloto, ella, azafata. Él tan tiquismiquis, ella tan llena de vivacidad. Dos mundos completamente opuestos y dos polos que habían empezado a atraerse.

Después del éxito de “Pasa la noche conmigo llega un nuevo spin-off en el que Daryl y Carol toman los papeles de protagonistas para hacer realidad, “Tampoco pido tanto”, el nuevo libro de narrativa erótica de Megan Maxwell. Y no lo voy a negar, una de las cosas que más me gustan de estos libros es que a pesar del tiempo y a pesar de todas las publicaciones nuevas… La esencia de “Pídeme lo que quieras” se mantiene viva. Aunque he de decir, que pensaba que en este tomo encontraríamos un reencuentro épico, dado que Daryl conocía a Yanira y Dylan, los personajes principales de los libros de; “Adivina quién soy” y “Adivina quién soy esta noche”. Y bueno, para mi desgracia no ha sido así, pero yo sigo guardando la esperanza de que en algún momento, Megan Maxwell nos sorprenda con algo parecido. (Guiño, guiño)

Daryl y Carol tienen en común a Lola, ella es la hermana de él y la mejor amiga de ella, por eso ambos se resisten a empezar algo que pueda poner en peligro su relación con ella. Y luego está lo del tema de la familia de Carol, ella, está más que convencida de que si Daryl los conociera, huiría en el acto porque es que son de todo menos normales. Y de verdad, que me he divertido mucho, mucho visitando esa casa en Venecia y conociendo a cada uno de sus integrantes, sobre todo a la nonna y sus hierbas… Y es que, sin duda, la autora ha hecho un trabajo increíble con los personajes secundarios de esta historia.

En cuanto a las escenas de sexo he de decir que están menos detalladas de lo que la escritora nos tiene acostumbradas y también he notado que había menos cantidad... Aun así, me ha encantado conocer cosas nuevas como el tema del dogging y el sextanmu, ya que son uno de los ingredientes que hacen totalmente diferente a este libro.

Más que como escritora, quiero destacar a Megan Maxwell como persona porque nuevamente, a través de sus letras, rompe con todos los prejuicios y lucha contra aquellas causas que nunca deberían de estar perdidas. Y es que la autora ha sabido integrar muy bien el tema del transgénero, al igual que también ha tratado a la perfección el asunto de la obesidad. Y por si eso fuera poco, este libro también contiene una trama bastante bien perfilada sobre los refugios de animales y el trabajo del voluntariado. Y de verdad, por cosas como estas, Megan Maxwell sigue siendo una de mis autoras favoritas.

Además, es que no he podido parar de leer en ningún momento, creo que hasta me he llegado a olvidar de comer y de ir a trabajar… Porque estaba tan enganchada a estas páginas y me lo estaba pasando tan bien que no quería soltar el libro.  Y aunque es cierto, que volvemos a ver el patrón de; protagonista masculino rico y serio, chica alocada y natural, un poco de “instalove”, una lucha de sentimientos y un final por todo lo alto…  A mí, en ningún momento, me ha disgustado, creo que es parte de la esencia de la escritora y a día de hoy, yo sigo disfrutando de cada una de sus historias y confieso que sus personajes me siguen conquistando y emocionando. Es más, no veo el momento de leer la siguiente novela en la que Can, el amigo de Daryl, será el protagonista.

En conclusión, “Tampoco pido tanto” aterriza en nuestras vidas para dejarnos sin aliento, para hacer que saltemos cada una de nuestras barreras y disfrutemos así, de una vida sin prejuicios y sobre todo, de un viaje con las personas que más queremos.


¡MUCHAS GRACIAS A LA EDITORIAL POR EL EJEMPLAR!

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