Reseña: Lola y el chico de al lado

A veces me pregunto la cantidad de minutos que pasamos ante un espejo; observándonos, mirándonos, ocultando nuestras imperfecciones, tapando todos nuestros defectos... A veces me pregunto la cantidad de minutos que pasamos preguntándonos; quien queremos ser, quien somos realmente y quien nunca llegaremos a ser…

Lola Nolan, es extravagante, es diferente y jamás se pondrá unos simples pantalones con una camiseta básica. A ella le gusta experimentar; mezclar colores, tejidos y añadir toda clase de complementos. A nadie parece importarle; ni a sus padres, ni a su mejor amiga, ni a su novio roquero mayor de edad… Es parte de su esencia y todos la quieren tal y como es, incluso Cricket Bell, el chico de al lado... A pesar del tiempo que ha pasado desde la última vez que se vieron, a pesar de que todo acabó mal antes de la mudanza, a pesar de que ella parece no haberlo perdonado… pero tampoco olvidado.

Vuelve la magia de Stephanie Perkins, la autora, para llenar estas páginas de pequeños instantes que harán que te metas de lleno en la historia. Una, que no necesita de dramas ni de efectos especiales para llegar al corazón de cada lector. Una, que juega con los sentimientos de las personas y se apoya en la cotidianidad para crear algo de lo más especial.

Lola y Cricket no se han visto en años. Ahora él, ha vuelto a su vida y a la ventana de enfrente y por mucho que ella lo odie por lo que sucedió en el pasado… no puede evitar fijarse en como él ha cambiado, en cómo se sigue poniendo nerviosa cuando él está cerca, en cómo hay personas con las que todo es mucho más fácil. Fácil, como debería de ser el amor entre dos personas que se quieren. Y de eso nos habla en cierto sentido esta novela, de como sabemos si estamos con la persona adecuada, de si existe el amor para toda la vida. 

Y hablando de, “comieron perdices y vivieron felices”, no sabía lo mucho que echaba de menos a Anna y a St. Clair, los protagonistas de “Un beso en París”, hasta que me los he encontrado entre las páginas de este libro. Ver cómo han cambiado sus vidas, como hacen hasta lo imposible por verse y como son tan felices juntos… no solo me pone una sonrisa gigante en la cara, sino que me hace creer rotundamente en el amor. Y esa es la auténtica esencia de Stephanie Perkins, que te hace creer, te hace soñar y te invita a reflexionar sobre lo que de verdad importa en la vida.

Y es que, Lola, tendrá que encontrar su verdadera identidad bajo todas esas capas de ropa que utiliza a diario, tendrá que tomar decisiones difíciles tras varias conversaciones con la luna y tendrá que confeccionar un vestido épico si quiere ir al baile de graduación…

En conclusión, “Lola y el chico de al lado” es una de esas historias que te hacen sentir bien, de esas que de alguna manera te hacen redescubrirte por dentro y de las que con pocos ingredientes consiguen hacerte feliz. La magia de las pequeñas cosas. La magia de Stephanie Perkins.

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