Reseña: Tercero sin ascensor

La cantidad de cosas surrealistas que llegan a pasar en una noche, no solo nos dejan con los recuerdos, las personas y las carcajadas en la garganta. Sino que esas noches en las que pasan miles de cosas y ninguna de ellas tiene sentido, acaban por transformarse en anécdotas tan inolvidables y únicas que con el tiempo, de una u otra forma, tienden a convertirse en leyendas. Y… ¿Quién no recuerda una noche así?

“Tercero sin ascensor” es la historia de una de esas noches. Júlia, Silvia, Lucía y Elena, las protagonistas de este libro, se verán envueltas en medio de una mudanza, varios partidos de fútbol y alguna que otra cita romántica. Y si a esto le sumamos; una fiesta de “disfraces”, varios viajes al hospital y una búsqueda para encontrar el compañero de piso perfecto… La noche, sin duda, podría convertirse en uno de los amaneceres más memorables que ha visto la ciudad de Barcelona.

Si algo caracteriza a Lara A. Serodio, la autora de este libro, es que suele integrar a muchos personajes en sus novelas. Esto, no resulta ningún problema sino todo lo contrario, ya que la autora les da una personalidad única a cada uno de ellos y además, siempre es de lo más divertido ver como los entrelaza entre sí y juega con ellos. Pero llegados a este punto, debo confesar, que el personaje de Silvia me ha ganado por completo. Su espontaneidad, su forma de ser y su cita con Adrià han hecho que disfrutara enormemente de las partes en las que ésta salía. Aunque también, quiero destacar, la relación de amistad que mantiene con Júlia porque me ha parecido de lo más bonita, especial y verdadera.

Sobra decir que es un libro que está plagado del situaciones surrealistas y si a eso le sumamos el comportamiento de nuestras protagonistas y sus formas tan divertidas y amenas de comunicarse… Pues no nos queda otra que reír y reír a cada página. Pero uno de los puntos más fuertes que tiene esta historia es que nos deja con varios tipos de relaciones de pareja que no solo aportan algo a la trama, sino que también, dejan al lector con varias reflexiones… Historias que empiezan, otras que acaban y segundas oportunidades que consiguen alejar la palabra miedo.

Creo que “Tercero sin ascensor” es uno de esos libros cargados de anécdotas reales y que de alguna forma, al juntarse, crean una historia para revivir. Incluso se nota que este libro en un principio iba a ser una película, no solo por el potencial, sino porque es una historia que se sale del papel cobrando vida propia en cada página. Además, creo que juega con la ventaja de no resultar predecible porque no sabes muy bien con lo que te vas a encontrar en el siguiente capítulo.

Lara A. Serodio rompe con la sociedad y sus prototipos, llenando de naturalidad y humanidad a estas páginas. Porque nadie debería de humillar, extrañarse o avergonzarse al ver a una mujer con pelos en cualquier parte de su cuerpo o sobrepasando la talla 36 y ni mucho menos, se debería de poner en duda el criterio de una mujer por opinar sobre futbol. Creo que la autora ha sabido normalizar muy bien estos conceptos y ojalá la sociedad, algún día, deje de inventarse defectos.

También, tengo que comentar que la edición está muy bien cuidada. Salta a la vista que la ilustración de Mar Cerdá para la portada es preciosa, pero es que además, la maquetación por dentro me ha parecido de lo más completa al contar con diseños especiales para los mensajes, e-mails y páginas de Wikipedia.

En conclusión, Lara A. Serodio tras su anterior novela, “Una vida M”, nos vuelve a deleitar con una nueva historia a contrarreloj donde la ciudad de Barcelona será la protagonista de una noche única y memorable que tendrá lugar en este “Tercero sin ascensor”.

¡MUCHAS GRACIAS A LA EDITORIAL POR EL EJEMPLAR!

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